Historia

HISTORIA

Orígenes de la Academia Argentina de Cirugía

Para aprender los orígenes de la Academia Argentina de Cirugía es necesario conocer las circunstancias históricas de su fundación. En 1910 la Argentina celebraba su primer centenario y atravesaba un período de gran riqueza y estabilidad. Jean Huret, viajero francés y autor de un libro sobre la Argentina publicado en París en 1911, se preguntaba como era posible que aún no fueran millonarios todos los argentinos. Basaba su argumentación en las cifras de los ingresos producidos por las exportaciones anuales y las eventuales – aunque ya previsibles – exportaciones futuras. Buenos Aires era una ciudad pujante y cosmopolita que recibía inmigrantes de todas partes del mundo. Era poseedora de la red de tranvías eléctricos más grande del mundo, había instalado desde 1901 una vasta red telefónica y todos los edificios públicos y privados que hoy atraen al turista ya habían sido construidos. Una arquitectura que reflejaba poder económico y nostalgia europea había reemplazado a la sencilla y sobria arquitectura colonial. La luz eléctrica había reemplazado al gas y los porteños se jactaban de que la iluminación nocturna de Buenos Aires era superior a la de París.

A pesar de tanta modernidad, aún no existía en la Argentina una sociedad científica que reuniera a los cirujanos ni una publicación específicamente dedicada a la cirugía. Sin embargo, entre 1890 y 1910 se habían construido en Buenos Aires 21 hospitales y la ciudad contaba ya 1.200.000 habitantes y alrededor de 500 médicos que practicaban procedimientos quirúrgicos de complejidad variable. En síntesis, tanto las circunstancias históricas como la situación profesional eran propicias para la creación de una sociedad de cirugía.

En 1911, un grupo de cirujanos, convocado por Daniel Cranwell, comenzó a reunirse en la casa de este último, ubicada en la misma manzana que hoy ocupa la Asociación Médica Argentina. Aunque no existía registro de lo dicho en las reuniones, el Acta N° 1 de la llamada “Sociedad de Cirugía de Buenos Aires” dice claramente que los objetivos de la sociedad eran “estrechar vínculos y aprovechar el inmenso material del que disponían los cirujanos de la república”. Tanto el estatuto de la sociedad como los boletines de publicaciones reproducían fielmente los de la Sociedad de Cirugía de París. Esta última había nacido en 1793, luego de que la Revolución eliminara la Real Academia de Cirugía. En 1935 la Sociedad de Cirugía de París se transformaría en Academia Nacional de Cirugía. Así también la Sociedad de Cirugía de Buenos Aires se convirtió en Academia Argentina de Cirugía en 1939 y por motivos políticos volvería a ser Sociedad de Cirugía de Buenos Aires en 1954. En ese año un decreto de gobierno establecía que la Academia debía eliminar el 50% de sus miembros. Para evitar esto, la Academia volvió a ser Sociedad de Cirugía de Buenos Aires y finalmente en 1969 recuperó su condición de Academia Argentina de Cirugía

Desde 1911 hasta hoy todas las comunicaciones presentadas a la Academia y sus discusiones correspondientes han quedado registradas: durante los primeros años en el Libro de Actas, luego en los Boletines y finalmente en la Revista Argentina de Cirugía. Único testigo fiel y privilegiado de más de 100 años de la historia de la cirugía argentina, la Academia continúa cumpliendo con su misión de difusión del conocimiento de los últimos avances de la cirugía en Argentina